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Lo sé...,
lo vivo y siento
lo vivo y siento
estás sólo a mí lado.
Pues si piensas en él
tu cercanía es lejana.
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Parece que fue ayer
cuando locamente
te enamoraste de mí.
te enamoraste de mí.
Dejé mujer..,
familia y amigos.
familia y amigos.
Tú, me lo pediste.
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Vivimos lejos de todo
a pensar de los daños
que dejamos.
que dejamos.
Los años eran semanas
el tiempo...,
ya no importaba.
ya no importaba.
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Éramos tan felices
que nos reíamos de todo.
Pero el dinero...,
se me terminó.
se me terminó.
Tu amor...,
también era un lujo.
también era un lujo.
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Entonces...,
le conociste a él.
le conociste a él.
Adinerado...,
más joven que yo.
más joven que yo.
Desde aquel día...,
lo nuestro, terminó.
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Dejo esté poema en la mesilla
cuando despiertes léelo.
No me voy porque quiera
me marcho...,
pues te he perdido.
pues te he perdido.
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Seguiré queriéndote
hasta que te mueras.
Te deseo lo mejor
con el dolor...,
de mi corazón.
de mi corazón.
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Gracias...,
por lo vivido.
Pero tengo que cumplir
la sentencia...,
por dejar a los míos.
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Gracias...,
por lo vivido.
Pero tengo que cumplir
la sentencia...,
por dejar a los míos.
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Eloy Peña.
Triste es que el dinero pueda con todo.
ResponderEliminarFeliz día.
Besos, Poeta.
Lo de amor con pan y cebolla... quedó en un dicho. Hoy, hasta las prostitutas, piden dinero...
Eliminar-
Un beso, María.