El alma me habla
mientras pasa la vida
sonidos confusos
que nadie me aclara.
Te quiero...
como nadie lo ha hecho
mientras meces al niño
apoyado en tu pecho.
Dos tetas tienes
como la vecina
una da leche
la otra me mima.
Soy hombre de cama
también de palabra
vestido o descalzo
la sabana me tapa.
Larga es la espera
como la luz de estrella
duerme conmigo
después de la cena.
El poema es tuyo
como mi cuerpo desnudo
el olor de las flores
de aquel polvo perdido...,.
Eloy Peña.
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