FIN DEL VERANO...,.



En una calurosa noche de este verano 

 estaba con unos amigos y les dije:

"Me voy a pasear descalzo por la orilla del mar".

 -

Me encanta el embrujo de las aguas rozando mis pies,

andar sobre la arena mojada, dar patadas al mar;

la luna, las estrellas, el ruido y el silencio

 de los sonidos de las olas.

La soledad y degustar lentamente un cigarrillo.

 -

Aquella noche..., una fuerte voz sentada sobre la arena:

-¡¡¡POR FAVOR!!!, ¿ME PODRÍA DAR FUEGO?-
-

Me acerqué y,  una hermosa joven,

se puso de pie y casi pegada a mí...,

cogió mi cigarrillo para encender el suyo.

 -

Al mirarla a los ojos,

 observé que estaban llorosos.

Parecía que me hablaban,

como los míos a los suyos.
-

¿Algún problema?, la dije.

 - Cosas de mujeres -

¿estás con el periodo?.

-¡¡¡NO, POR FAVOR!!!-

 -

Bueno, te dejo.

-¿Por qué?, me contestó-

Porque tengo que seguir mi camino,

 -¡Qué! ¿Por qué, no me besas?..., me dijo-

 -

Y sin saber, ni pensar,

 nos unimos en un fuerte abrazo;

 acompañado de un interminable, beso.
- 

Nuestro primer beso.

 Con mezcla de misterio,

 sonrisas y brisa de mar...,.

-

  Y así empezó un breve romance; 

en la playa y junto a la orilla.

 De una calurosa noche de septiembre;

 con luna llena, estrellas y, de fondo, el mar.

-

 Donde una mujer y un hombre

 por un azar del destino

 se fundieron como dos almas gemelas;

 necesitadas de un repentino, sentir.
-

 Que se escondía en sus subconscientes;

 como si sus vidas fuesen a empezar de nuevo.
Después, se ajearon del amor de una noche;
que fue corta pero eterna.

-

Eloy Peña.