para recordar los olvidados recuerdos;
así pensarán que soy raro
en un mundo donde todo está muy claro.
Soy bajo de pie pero alto sentado
de ojos azules si los tengo cerrados;
amante del trabajo si estoy en el paro
soñador sólo de los sueños largos.
Me gusta las mujeres hasta desnudas
nadar por el rio como un galgo;
subir las escaleras sin peldaños
para alcanzar las nubes aunque esté nublado.
No es un cuento lo narrado
son mis fantasías poéticas;
que sin decir nada dicen algo
como un susurro en un volcán apagado.
No es un cuento lo narrado
son mis fantasías poéticas;
que sin decir nada dicen algo
como un susurro en un volcán apagado.
Eloy Peña.
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