cuando te mueras.
Tampoco te llevaré flores
las prefiero en las tiendas.
Estate quieta no te muevas
como la caja que te encierra.
Las gentes se te acercan
en coche y en bicicleta.
El tanatorio se llena
para comerse sus penas.
Porque no hay canapes
el presupuesto no llega.
Es treinta y uno de febrero
cumpleaños de Tejero.
Llueve a mares
la acera está seca.
La noche se acerca
voy a hacer mi cena.
Mañana no iré a tu entierro
como tú no vendrás al mío.
Consolaré a tu hermana
entre colchas y sabanas.
Pues la vida me sigue
mientras conmigo vaya.
Eloy Peña.