HERIDAS ABIERTAS...,.

A veces quisiera volar

junto a un elefante africano;

en la profundidad del océano

sin miedo a mojarnos.

Fantasías que guardo
porque creo en milagros;
los reales y los soñados
 también los nunca contados.

Las flores no crecen

ni en el Sol ni en la Luna;

sólo crecen las dudas

de los misterios que ocultas.

Son locuras posibles
como el amar sin ser amado;
por tu marcha con otro
para dejarme a un lado.

Ahora sé que eres feliz
algo que me alegra;
aunque dentro de mí
tus heridas nunca cierran.

 Eloy Peña.

CON AIRE Y CON VIDA...,.

Aún no puedo evitar el porqué

de aquel amor ya acabado;

días, semanas y años,

de recuerdos aún no olvidados.

Creo que estoy despierto

para poder afirmarlo;

pues lo vivo, viviendo,

aunque ya es sólo pasado.

Al amor jugamos

como dos aficionados;

mientras duró la partida

con aire y con vida.

Todo se va, nos vamos,

como lo bueno y lo malo;

pero algo siempre queda

para ser siempre recordado.

Eloy Peña.

SI PUDIERA...,.

POEMANDO QUE ES GERUNDIO...,.

Si al despertar ves que no anochece

entre sueños nunca soñados;

y la persona que está a tu lado

aún no ha llegado.

Si tu cuerpo palpita

porque la cama sigue fría;

no te asustes,

pues no es normal lo que ocurre.

Si no lees lo que escribo

cuando el sol te deslumbra;

verás que no ves nada

pues la ceguera te llama.

Si te ofrecen una vacuna

y dudas por tu mañana;

mejor no te vacunes

para que no mueras por nada.

Eloy Peña.

LA LOBA Y EL LOBO...,.

 

Silencios perdidos en noche triste y fría

como la muerte la soledad y la lejanía.

Allá en un monte lejano entre la tierra y el cielo

viven dos lobos aislados sobre un manto terciopelo.

La loba se siente triste el lobo desconsolado

pues un cazador se dice sus cachorros ha matado.

La muerte llamó a sus puertas y se llevó a los pequeños,

nacen tres flores nuevas escondidas tras los leños.

El tiempo se fue alejando acercando los recuerdos

las heridas se cerraron y el rencor se fue muriendo.

Los dos lobos no olvidaron, aullaron, con sentimiento.

Pero el perdón se fue adueñando y la paz llego de nuevo.

Que el pasado fue pasado y la vida es un anhelo

allá en un monte lejano entre la tierra y el cielo…,.

Eloy Peña.

RAREZAS...,.

No te extrañe lo que escribo

cuando ni sé lo que digo;

pues mí pensar es un laberinto

a veces humano, otras divino.

Soy como un pintor de palabras

que sin pintarlas las talla;

para que no se vallan

con el pasar de los tiempos.

Quiero que el poema no muera

que sólo mueran los muertos;

para que la vida siga

como algo que es nuestro.

Rarezas que en mi pensar juegan

para así enloquecer con ellas;

como el amor perdido

entre recuerdos y penas.

Eloy Peña.