La noticia a caído como una bomba desde el cielo. Este verano vino a pasar unos días conmigo el Papa y su hermano (sacerdote), a Benidorm. En un ático (cercano al cielo) que tengo en la playa de Levante. Fueron 10 días de oración, pasear, rezar y de ponernos ciegos... de paellas con sangría y horchata. Ya entonces me dijo, que le gustaría pasar sus últimos días como una "persona normal" y dejar a un lado el Papado, por si las moscas. Pues es sabido, que según las profecías de Nostradamus... avaladas, por Monseñor Rouco Varela (el español) este Papa sería el último de la cadena Papal. Hecho, por el cual si se retiraba ya no sería el último, porque no moriría como Papa; por lo tanto, tampoco fue Papa. ¿DIGO, YO...?.
Una vez dicho, lo dicho... mucha gente ignorante se pregunta hoy, ¿por qué, dimite el Papa si no está imputado en nada? - algo que no entiende ni dios - Pues muy fácil, por lo narrado al comienzo de este escrito. Por otro lado el Gobierno del PP se está frotando las manos por la venida del nuevo Papa. Será invitado a Madrid, Valencia y al Valle de los Caídos. Algo, que traerá nuevas obras y comisiones, como las que ya figuran en los papeles del Bárcenas... de las pasadas visitas realizadas en España. O en los dominios del PP (de Escrivá de Balaguer).
Para terminar esta homilía... lo único que me causa extrañeza es la fecha. Día 28 (fecha de inocentes) de febrero; NO el 29, 30 o 31. Algo raro, raro... porque en España estamos viviendo un año MARIANO... o lo que es lo mismo: un año sin gobierno, sin ilusiones, sin puestos de trabajo, sin viviendas dignas y sin justicia. Por otro lado, y como jugador que soy pregunto, ¿el Papa ha dicho, o le han dicho que diga...? Amén.
Eloy Peña Rico, denunciante oficial del Ayuntamiento de Madrid.
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