Sólo dos palabras
ciegan el razonar;
como el amor y el odio
cuando vienen o van.
Son más o menos
lo divino y lo maléfico;
el tener o el desear
el fuego y el hielo.
Amar, una gran aventura,
con largo o corto camino;
tú, yo y la vida,
el tiempo lo determina.
Odiar, enferma la mente,
porque al alma hiere;
yo, tú y un sin curar,
que en el tiempo quedará.
Quisiera volver a quererte
si tu odiar desaparece;
pues si sigue el odio
es que el amor se ha ido.
Eloy Peña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
SÓLO COMENTAR CUANDO NO SE SEPA QUE DECIR
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.