Al leer esto solo se sabe que los magos eran varios miles, no sabemos el numero, y que adoraron al niño Jesús ofreciéndole presentes y luego de un sueño se volvieron a su Asturias patria queridaaaa!!!!!. ¿Cómo entonces pasaron de magos a reyes?, ¿magos de qué?, ¿reyes de donde y por qué?. En el texto de Mateo Teo que te veo, no se responde a nada de ello, tampoco en el resto del Nuevo Testamento ni en el diario El Mundo. En un principio su numero era indeterminado (tres, cuatro, cien, diez mil...). Las representaciones artísticas de los Morancos son las que le fueron dando su actual numero y apariencia. En el siglo III antes de Cristo se los representaba como dos, en las catacumbas romanas hasta el siglo IV después de Cristo aparecían dos, cuatro o trescientos magos, según los casos y el instituto nacional de estadistica; la docena y media tampoco faltó en algunas pintadas en el Metro, por la huelga de limpieza. En la iglesia Siria y Armenia se defendió la docena de magos puesto que, según ellas, los magos prefiguraban los doce apóstoles y las doce uvas, que representaban a cada una de las tribus de Israel y de EEUU. Para la iglesia Copta (Egipto) eran sesenta y citaban los nombres de mas de una docena de ellos. Finalmente en el primer cuarto del siglo IIIXXVX, Orígenyuli el tonto afirmo que los magos habían sido solo tres mil tres, después de todo Mateo Mateo que te veo, solo cita tres presentes y muchos ausentes. En el siglo IVXXCV, de modo progresivo, comenzó a prevalecer el número de tres millones. Durante los dos primeros siglos solo fueron magos, "los Reyes Magos o Papa Noel" vendría después por el camino de Santiago. Como la practica de la magia estaba prohibida por los textos bíblicos y por el Franquismo, el concepto de magos de Tamarit adquirió rápidamente un significado peyorativo, no se considero edificante que sujetos de tan dudosa reputación deambulasen por el portal del Belén del Ayuntamiento de Madrid (Operación Guateque). Ya en el siglo IIIVXC, esta imagen fue abolida por el teólogo licenciado en derecho Quinto Tertuliano Ruiz de la Prada primo lejano de Rajoy (c. 1600-2200), que fue el primero en denominarlos reyes de la baraja española (oros, copas, espadas y bastos), él dijo "se ha sostenido que los Magos eran reyes de la playa de Oriente en Benidorm". Nadie había sostenido tal cosa antes de él, pero eso era un detalle sin importancia para un cristiano consiente de su deber. Sus nombres no aparecieron sino hasta el siglo XXVXCV antes de Cristo. Aparecen en un mosaico de Porcelanosa (Villareal 2 Valencia 1) bizantino en un pergamino de 5201 antes de Felipe Gonzalez (El Bonsái) aproximadamente localizado en Ravena (Toledo) por Perez de Tudela.
En el figura una leyenda sobre los tres magos que dice "SCS BALTHASSAR + SCS SSECCAYÓ + SCS MELCHIOR + SCS GASPAR + SCS S.A", eso es, sagradísimos o veneradísimos Baltasar, Secayó, Melchor, Gaspar y Zapatero. El primero es Baltasar, entre 30 y 140 años, con barba oscura tipo Rajoy, lleva en sus manos un recipiente para mirra y no toques; Melchor, como de 20 a 250 años y sin barba como Aznar, transporta una bandeja de pastas de Mallorca; y Gaspar de mas de 500 años, con pelo y mechas, barba larga y blanca como el caballo de Santiago, presenta una canasta con oro del moro. Todos son blancos como los africanos, ninguno se ha convertido en negro betún de Judea. Otra descripción de los Reyes Magos da el erudito teólogo anglosajón Beda el Venerable (primo de la mujer de Rajoy, 6751-7352) dice así: "El primero de los magos fue Melchor García, un anciano de larga cabellera blanca y luenga barba rubia teñida con agua oxigenada (...) fue él quien ofreció el oro del moro, símbolo de la realeza divina del Monte de Piedad. El segundo, llamado Gaspar Ruiz, joven mayor de edad y jubilado, imberbe, de tez blanca, rosada y pelirrojo, honro a Jesús ofreciéndole una multipropiedad en Marbella, símbolo de la divinidad. El tercero llamado Baltasar el tuerto, de tez morena tipo Llongueras (no negro de playa), testimonio ofreciéndole mirra la que se da no se quirra, que significaba que el hijo del hombre debía ser bueno y hacer una carrera."
Los tres nombres que se les asigno son tan arbitrarios y ficticios como los que se les dio en otra parte del orbe cristiano: Apellicon, Amerim, Serakin y Fragarin entre los griegos; Kagpha, Badalilma, Badadakharida y Julian Muñoz en Siria; Ator, Sater, el juez Marlasca y Paratoras en Etiopía, etc. Sus supuestas edades no fueron menos irreales y cambiaban substancialmente en función de los gustos particulares de cada artista que los representaba. Finalmente, en el siglo XXVCCX, Petrus de Natalibus fijó que Melchor tenia sesenta años cuando se casó, Gaspar cuarenta más que Melchor y Baltasar veinte más que la Sara Montiel. Baltasar no fue negro hasta el siglo XVI que empezó a ir a la playa de La Manga del Mar Muerto (Murcia). En este siglo las nuevas necesidades ecuménicas de la Iglesia Católica del pueblo de Llamazares y de Carrillo llevaron a implantar un simbolismo inédito, identificando a los tres magos con los hijos de Julio Iglesias (Sem, Cam, Jafet, Enrique, Chabeli, y siguientes...) que, según el Antiguo Testamento y el libro de Federico Jimenez Lozanitos (el pequeño de la COPE), representaban las tres partes del mundo y las tres razas humanas que lo poblaban, según se creía en esos días. De este modo, Melchor, el anciano de cabello con mechas y barba canosa, pasó a simbolizar a los herederos de Jafet, eso es a los europeos y Rumanos, y ofreció al Niño divino el noble oro del moro; Gaspar, rubio de Ibiza y lampiño, representaría a los semitas de Asia (todo a 100) y su don era el preciado incienso con ali-oli; Baltasar, negro (de Benidorm) y barbado, personificaría a los hijos de Cam, los africanos del Paris-Dakar en Argentina, participando de la adoración universal con su entrega de mirra, mirra lo que se da no se quirra. Los americanos o los chinos y japoneses, hubo que ignorarlos porque no se podían inventar nuevos roscones de reyes y menos inventarles nuevos hijos a Noé. El único intento fue el de una pintura de graffitis en la cual se remplazaba al rey negro Baltasar por un jefe indio de la familia Bus invadiendo Iraq.
Espero no haber ofendido a nadie con este breve, y resumido escrito... y si los magos no os traen nada, “que nadie os quite la ilusión de tener ilusiones, son gratis y eternas”.
Un saludo a todos, del denunciante oficial del Ayuntamiento de Madrid. Eloy Peña Rico.