Mi querido amigo del alma.
Tiempo ha... que no sé nada de tí. Espero que cuando leas lo que me han escrito... estés bien, yo bien por las gracias de Dios:
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Hace unos días te recordé
porque estuve donde nunca estuvimos,
pero pensábamos estar.
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También me acordé,
"de que no me acuerdo",
de las aventuras que he olvidado.
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Cosas de la vida y de este País
donde hemos tenido la suerte de nacer
porque nuestras madres no nos abortaron.
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Me separé de mi mujer que antes fue tuya.
Estoy más solo que la luna en una pared.
Mis hijos no vinieron pues nunca nacieron,
tampoco fuimos a buscarlos...,.
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Mis padres se empeñaron en morirse
y lo consiguieron...,.
Con 98 y 96 años en plena juventud.
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Mis negocios..., una ruina como yo.
Más que negocios fueron perdidas de vida,
de tiempo y de pequeñas cosas
que juntas son muy grandes.
Por el afán del puto y puto, dinero.
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Hoy sólo tengo dinero que se multiplica solo, día a día. Dinero, que no es falso pero no es válido. Porque mi estado físico me impide moverme y disfrutar de un bocata de calamares, un vaso de vino o de una vista a cualquier sitio. Porque también me quedé ciego. Todo por querer volar como un pájaro sin ser pájaro y caer al suelo sin matarme..., para vivir muerto.
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Amigo, vivo con mis recuerdos
solo con mis recuerdos...,.
Escuchando la radio o la televisión
es todo lo que tengo en este mundo.
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No sé como te irá... porque siempre has sido una cabra loca fuera del monte, por tu rebeldía heredada de tu infancia. Esa infancia que te ha hecho crecer pero seguro que no te ha cambiado.
Ya que los principios pueden ser buenos o malos pero fueron el génesis de nuestra existencia. Para entrar a ver y a vivir lo que se conoce como vida... tú vida, la mía y la de los demás.
Te juro amigo que hoy preferiría no haber nacido.
Por ello a lo mejor no quise hijos,
mujer ni nada.
Porque la vida es un juego muy arriesgado
en la que estás para dejar de estar...,
y para dejar de estar, mejor no venir.
"El tiempo no pasa...,
se nos escapa, se nos va".
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Bueno amigo sin ser amigo como tú decías..., espero que sigas vivo para leerme. En caso contrario búscame un lugar que este cerca del tuyo y podamos tener una eternidad para hablar de lo que un día, por circunstancias de la vida, dejamos de hablar.
Un abrazo y un beso a mi amigo del alma.
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PD.- Te adjunto una foto de hace 40 años cuando solo flotaba para nada.
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Eloy Peña.
