POLITICUCHOS...,.

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Mi bandera no es tu bandera,
ni pienso como las ovejas.
Soy libre...,
sin ser taxi ni retrete.
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Vives de la mentira

y de tu cara dura.

De creerte un ídolo

de hormigón armado.

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Nadie te obligó,

a ser un sinvergüenza.

Tampoco a que no lo fueras,

 pero la soberbia te maneja.

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Si fueses político
 pensarás que no va contigo.
En verdad te digo,
que estás confundido.
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No os merecéis un poema,

ni que mi tiempo pierda.

Sólo sois marionetas,
las mentiras, vuestras cuerdas.
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Eloy Peña.