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¡PERDONA!.
Sé, que no lo esperas.
Pero al pensar lo pienso.
Te lo quiero y voy a contar:
Hoy, ya es tarde
para empezar de nuevo.
Esperemos al mañana
ese tiempo incierto.
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Nos quisimos tanto
que es imposible volver.
Estemos un tiempo apartados
para preparar algo nuevo.
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Probemos con otros.
Para recordar lo nuestro.
El fuego se apagó
quedan sus brasas.
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Mi cuerpo aún huele a tu cuerpo.
Cuando nos besamos o abrazamos.
Mis sueños, pensamientos, deseos.
Los tengo. Siempre los llevo.
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Sabes lo que te digo,
ni tiempos ni treguas ni esperas ni pruebas.
Porque conmigo te quedas.
¡¡¡TE QUIERO!!!
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Eloy Peña.
Que canción tan bella y aún más acompañada por ese escrito tan precioso!!!
ResponderEliminarGracias por venir...,.
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EliminarBuena decisión… Una contundente petición, difícil de rechazar… Que no se apague el fuego!🔥
ResponderEliminarBsoss miles, y enormes.
Si al fuego le añadimos ginebra... aumenta el calor y puede enloquecer... los sentidos del tacto y del sabor.
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Gracias por tu comentario.
Un beso, Ginebra.
Cuerpos que huelen a húmedas pieles nostálgicas, a deseos latentes entre recuerdos de un pasado...
ResponderEliminarUn placer leerte, amigo Eloy.
Besos y feliz día.
Dicen, que rectificar es de sabios. Primero quiere romper pero el amor se lo impide.
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Muchas veces tengo un pronto... pero rápido me arrepiento.
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Un beso, María. Feliz relatos jueveros.