El otro día me encontré en el hotel Ritz de Madrid (España) con un negrito venido del África tropical. Le dí una limosna y me limpió los zapatos de charol de color naranja que me habían traído los reyes magos del Corte Francés. Mientras me los sacaba brillo me dijo: que en su País no conocían la democracia, la horchata valenciana y el dinero, negro. Hablamos y hablamos... hasta que vino un camarero con la factura, ví la nota, y le dije al negrito: ¡¡¡MARICÓN EL ÚLTIMO!!!.
Una vez en la calle cogimos el coche del negrito y nos fuimos a ver a una monja amiga que vende niños y corderos para navidad. Tiene el mejor cordero de la provincia de Segovia (España) porque su padre era ganadero en el reino de Aragón y taxista los días festivos en el Puerto del Escudo. Más tarde y en el restaurante de un amigo en Ávila (España), le quitó las plumas al cordero y le dió vuelta y vuelta... Con un buen vino de la zona, nos lo comimos en unas 4 horas (3 en Canarias).
Una vez que pagó el negrito la cuenta... cogí el coche, y le dejé para que se buscase la vida. A los pocos kilómetros se paró porque no tenía gasolina, por lo que me ví obligado, a hacer auto stop. Se detuvo un coche (AUDI) que conducía una joven rubia desnuda que según me comentó: "venía de ver al ginecólogo, y no la había dado tiempo a vestirse, porque inesperadamente se había presentado la mujer del doctor".
Se empezó hacer de noche y como el coche no llevaba luces de navidad tuvimos que parar en un motel de carretera (El Beso Negro). Al salir del coche la presté mi ropa por lo que yo, entré, en camiseta y calzoncillos, haciendo que venía de hacer footing.
Pedimos dos habitaciones pues soy un hombre muy casto y putero. La invité a los cafés... ella, ya había pagado la cena. El lugar era muy acogedor y en la TV en vez de echar El Gato al Agua ponían una película porno en la que trabajaba Pipi la Piedra (Puntos Pelotas). Fumamos de todo hasta tabaco. Después nos despedimos, ¡¡¡buenas noches - buenas noche!!!.
Ella se debió levantar temprano ya que había pagado la factura de los dos, y dejado en recepción un sobre (no del PP) con su tarjeta y 700 dolares (parecían de Fraga con melenas). Por lo que ne ví obligado a volver a Madrid (España) corriendo una especie de maratón. FIN.
Eloy Peña Rico, denunciante oficial del Ayuntamiento de Madrid.
