¡Hola!, ¿cómo estás?
no mires atrás;
lo pasado ya no está
se fue y no volverá.
También los que se fueron
tampoco hoy son;
como la flor marchita
o la estrella sin luz.
Parece que fue ayer
anteayer o nunca fue;
abrazados en cualquier lugar
besos que ni sumarlos puedo.
Tiempo pasado
que nos robó nuestro tiempo;
noches con luna y sin ella
de frio calor de reír o de llorar.
Corazones de latidos rápidos
falta de aire en los pulmones;
temores miedos temblores
sólo por ser dos amores.
El tuyo y el mío
que eran sólo nuestros;
porque nos cegaban
con su energía inesperada.
Aún me acuerdo más de ti
pues sigues dentro de mí;
como si fueses divina
por ser una especial mujer.
Eloy Peña.
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