CAFE, son cuatro letras
como Eloy Peña Rico Abad;
amor y odio
como Dios y nada.
La C de caliente
la A de amargo
la F de fuerte
la E de escaso.
El cielo con sus nubes y astros
la tierra el mar y los ríos;
la sed o el hambre
son tuyos y también son míos.
Me cansa, me aburre y me asquea,
ver y oír siempre lo mismo;
es como un despertar nublado
con marionetas por todos lados.
Donde sólo tiene valor el dinero
también el famoso y el pecado.
Los que hablan del pasado
sin nunca haber estado.
Los que juzgan así o los del asá
los que se creen hasta sus palabras.
Los que saben de todo sin saber de nada
porque son papa gallos amaestrados.
Qué pena, llegar la noche sin cena,
porque su físico les gobierna;
pues su cerebro está calvo
con cuerpos más que tatuados.
Amantes de las cosas bellas
pues de las otras ni se enteran;
sin distinguir el sabor del gusto
tampoco lo barato de lo caro.
Los que con una carrera son alguien
porque sin libros son patanes;
para comer, dormir y soñar,
vivir o morir, sólo hace falta tiempo.
Mierda de mierdas,
que desnudos somos iguales.
Pedazos de carne con huesos
hasta quedar en esqueletos.
Pues caga el Rey y el Papa
el pobre y el rico;
el ignorante y el sabio
el bueno y también el malo.
Eloy Peña.