MI CARTA.

 

 

Muy señores míos:

 

                             En primer lugar, quisiera agradecer a los poderes establecidos desde el jurídico, político, monárquico, financiero y religioso... que me dejen malvivir en su País y así poder disfrutar como un pelele o una marioneta, de sus decisiones personales. Ya sean en perjuicio mío o en el de una mayoría que están o estamos solamente para votar o botarles cada 4 años. Para que sigan viviendo del cuento de La Bella Democracia en el País de las Maravillas.

 

Lo que estamos pasando y lo que vendrá... es solamente por culpa nuestra. Ya  que hemos consentido por fuerza mayor..., que "una manada de manadas" dirijan nuestras vidas. Porque nos hemos creído, "como ignorantes que somos", que los niños siguen viniendo de París y que ustedes son gente responsable, competente y honrada. Algo que hemos comprobado, día a día, que es más difícil que un camello pase por un dromedario o el volver de la otra vida.

 

Ayer esto, hoy lo otro y mañana ¿qué pasará mañana?. Ya que vamos de sorpresa en sorpresa o de fracaso en fracaso. Pues nuestros administradores se lo administran para ellos solos. Pues "muchos" somos una panda de borregos que nos da lo mismo las dictaduras, las democracias, la esclavitud o las guerras. Porque por nosotros mismos, no sabemos o podemos decidir, para eso están ustedes para decidir por todos, aunque la mierda siempre vaya a parar a los mismos.

 

Atentamente,

 

 

Eloy Peña Rico, denunciante oficial del Ayuntamiento de Madrid.