Intentaré explicártelo,
sin justificarlo y sin mentiras;
el amor es química
que en el cerebro habita.
Podrás pensar lo que quieras
mientras el tiempo pasa, mientras vuela;
porque el ayer está lejano
nunca podría alcanzarlo.
Fueron momentos de nuestras vidas
sin pensar que los momentos terminan;
si más hubiesen durado
más largar hubiese sido mi agonía.
Yo, no inventé los sentimientos,
me vinieron ellos solos;
para darme lo mucho que sentí
para luego quitármelo por rutina.
Es la vida con sus subidas y bajadas
llena de realidades, de sueños y de pesadillas;
que bien o mal tenemos que guardar
en ese baúl que en algún lugar está.
Eloy Peña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
SÓLO COMENTAR CUANDO NO SE SEPA QUE DECIR
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.