Agonizar de amor
es como fuego helado;
allá en la soledad
cercana de lo alejado.
Te quiero tanto
que el querer me ahoga;
al saber lo que siento
por no estar a tu lado.
Rayos y truenos
por mis venas circulan;
para un triste corazón
que soporta torturas.
Ya estoy viejo
por el pasar de los años;
con andares cansados
de muchos amores pasados.
Tristes recuerdos llevo
de mujeres que fueron;
por dejarme o dejarlas
pues la vida es el juego.
Que venga Dios y me lea
el poema me embarga;
mientras los cielos se abren
los sentires me cierran.
Eloy Peña.