HASTA QUE NOS ECHEN.

Mi foto
Benidorm, Alicante, Spain
Escribo por escribir para seguir escribiendo.

jueves, 31 de enero de 2013

CARRUSEL DEPORTIVO S.A.


El otro día me fui con tres amigas a ver la final de balonmano del mundo, mundial. Como no llevábamos entradas y tampoco quedaban en las taquillas (tapiadas) me ví obligado a sacarlas en la reventa. Allí estaba el amigo Urgandarín, muy serio como una estatua de cera de los oídos, vendiendo, entradas para pagarse parte de su fianza, ¿creo?. Las chicas compraron las tres suyas y la mía, por no hacerlas un feo.
El partido fue apasionante... aunque no llegué a entender por qué no jugaban Messi y Ronaldo ya que, manos tienen. Llegó el descanso y fuimos a tomar unos refrescos con ginebra y whisky que también pagaron las chicas... por no hacerlas otro feo. En el lugar, estaba el citado Urgandarín intentado vender una exclusiva de Letizia (futura reina de España en el exilio).
En resumen, como no me gusta el balonmano y no lo entiendo, me pasé todo el partido leyendo la prensa en mi tableta de turrón, Sony <"Bueno, las tres mozas son Anka, Luka y Vika que viven conmigo en su casa"> Una vez en la calle fuimos a cenar a un restaurante donde trabajan unas amigas de mis amigas por lo tanto, tampoco pude pagar. Como no hay dos sin tres, volví a ver a Urgandarín vendiendo entradas, para la inauguración de los juegos olímpicos de Madrid (España). Que le había dado "su amiga la Botella" (sin alcohol).
 
Para ir terminando, anoche, ví el partido R. Madrid contra el Barça. Porque Anka, Luka y Vika se empeñaron en invitarme a ir al campo (no supermercado), pues no lo conocían. Fue un partidazo a pesar del diluvio de agua  que cayó. Con un injusto empate a  UNOS  de los monstruos Ronaldo (el argentino)  y Messi (el portugués). Algo que les elimina de la Copa del Generalísimo al no haber ganado ninguno.
La verdad es que no entiendo mucho de fútbol chapas... y menos, por ver al salir otra vez a el Urgandarín, en un puesto, vendiendo banderas republicanas y por otro lado, pidiendo firmas para que su suegro siga siendo el rey de España. FIN.

Eloy Peña Rico, denunciante oficial del Ayuntamiento de Madrid.