Sé, desde muy niño... que no es correcto o está muy mal visto decir o llamar, ¡¡¡HIJA o HIJO de PUTA!!!... por el margen de error que pueda haber. "Pues ni son todos los que son, ni están todos los que también, son". Sabemos, las personas amantes de la cultura universal que las palabras "HIJOS o HIJAS de PUTA" tienen su origen en la lengua de ternera castellana traída por los Fenicios años atrás, en épocas de celo.
El mismo Ulises (estando a punto de morir por los recortes habidos en la sanidad púbica) en un Puticlub de la Junquera (Cataluña) le dijo a su hijo: ¡bésame Herculito!. Hecho, que delata que Ulises reconoce que su hijo era maricón de dar y tomar... como hoy políticos o similares S.A.
Es habitual llamar HIJA o HIJO de PUTA a personas aunque éstas, no sepan, quien fue su verdadero padre. Porque la vida da muchas vueltas y, un "polvo" a destiempo, lo puede tener cualquiera. Ya que el sexo no se puede controlar con el seso. Por ello, hay tantos chinos... porque se pasan el día tirándose chinitas con el tirador, sin goma.
Hace años, pajeándonos, en el seminario de la vida... me dí cuenta que todos presumimos de lo que no somos, por ejemplo: Si un político, banquero o gran empresario es en un HIJO DE PUTA, ¿por qué no sale publicado en el BOE de las Comunidades Autónomas aunque no las gobierne el PEP.es?.
Hoy, mientras descapullamos las margaritas de la cercana primavera... quisiera terminar este sabio escrito, como lo empecé: Sé, desde muy niño... que no es correcto o está muy mal visto decir o llamar, ¡¡¡HIJA o HIJO de PUTA!!!... por el margen de error que pueda haber. FIN.
Eloy Peña Rico, denunciante oficial del Ayuntamiento de Madrid.
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